Resulta que sabía que sos una persona en la que no se podía confiar en un cien por ciento, que con la mayoría de tus conocidos sos más falsa que billete de tres pesos. Pero que reacciones conmigo de esta forma, y no sólo eso, si no que me insultes frente a personas con las que tuve una relación, es patético. Como si esa persona fuese a fiarse de tu palabra antes que de todo lo que sabe de mí por mi propia boca, y por la relación que tuvimos. Ya a esta altura no puedo esperar mucho, debería estar acostumbrada a que en la vida puede pasar de todo. En fin, como dijiste vos, una menos en la lista de amigos. Lo mejor, es que seguramente cuando leas esto (porque sos tan increíblemente chusma y metida en la vida de los demás) vas a dedicarme un par de insultos o comentarios con cierta gente, y la verdad, me importa muy poco.

(Había pensado en bloquear el acceso a cualquier persona a mi blog, así te ahorraba el hecho de que tengas que meterte a ver cada día si había algo nuevo que puedas utilizar para divertirte insultando, pero sinceramente, no tengo nada que ocultar)