Lo recuerdo sin azúcar y sin crema y sin excusas. Lo recuerdo en la mañana despertándose en mi cama. Lo recuerdo en la pereza de una rutina que empieza. Lo recuerdo preocupado por lo que hoy no vale nada. Lo recuerdo en sus dilemas entre cuentas y poemas, en el ruido de la calle perdido siempre en los detalles. Lo recuerdo, sin vergüenza. Lo recuerdo en un segundo en que llegó a lo más profundo. [...] No recuerdo bien su cara, ni su voz, ni su mirada. No recuerdo sus historias, ni sus penas, ni sus glorias. Lo que a veces me lo encuentro caminando entre mis sueños. Me recuerda un sentimiento del que ya no somos dueños.
1 comentario:
Disculpa, te molesto.. de donde lo sacaste? Es muy lindo y lo lei en varios lados.. lo quiero usar pero no se de donde salio.
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